Situada
en la Plaza de la Libertad, saliendo de la Plaza
Mayor con la calle Concejo, al final de la Plaza de la Libertad, en la calle de
Espoz y Mina, antigua calle de Cabrera, nos encontraremos la casa de Rodríguez
del Manzano actualmente propiedad del Obispado y utilizada como casa sacerdotal.
Fue construida entre finales del siglo XV y principios del XVI según estilo
gótico, (don Francisco Ramos del Manzano fue catedrático de la universidad,
presidente del Consejo de Indias y de la Cruzada y jurisconsul en el Congreso
de la Paz de los Pirineos de 1.659 concertada entre Luís XIV de Francia y
Felipe IV de España, poco después el rey le concedió el título de conde de francos cuando en realidad este ya había dado paso al
renacentista. De esta época es la puerta, ya adintelada pero todavía recuadrada
por un alfiz (moldura en forma de rectángulo que enmarca un vano o un arco),
dentro del alfiz hay dos escudos nobiliarios. Es de destacar su centrado balcón
de típica balaustrada castellana. Conviene recordar que fueron los hijos de los
dueños quienes dieron muerte a los de doña María la Brava. Dispone de tres pisos que no están separados por ningún elemento arquitectónico.
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